José Clemente Orozco: Hombre de Fuego (En Español)

La vida de Orozco es una de las grandes historias del arte moderno, repleta de drama, adversidad y logros extraordinarios. Un prodigioso pintor de caballete, Orozco fue, antes que nada, un artista público cuyos grandes logros incluyen murales creados no para mecenas individuales, sino para la sociedad.

Cuando era un joven estudiante, José Clemente Orozco quedó cautivado por el trabajo del artista mexicano José Guadalupe Posada. Su labor como ilustrador avivó la imaginación de Orozco y lo “impulsó a llenar el papel con sus primeros pequeños dibujos.”

Orozco pintó uno de los murales públicos más icónicos de México, que desafió directamente a instituciones veneradas. Su formidable pintura del Padre Hidalgo, el “George Washington de la Independencia Mexicana”, representaba al líder como un profeta empuñando una espada que “purificaba el mundo con derramamiento de sangre”.

En 1917, José Clemente Orozco dejó México para encontrar un mejor lugar para hacer arte en Estados Unidos. En el camino, Orozco fue detenido en Laredo, Texas, donde los funcionarios objetaron muchas de sus pinturas y las consideraron “inmorales”.